La experiencia internacional enriquece el repertorio cultural y valora la diversidad
La inmersión en otra cultura prepara los jóvenes para relacionarse con la diversidad
Por: Tatiana Maria de Paula Silva |2 de junio de 2014.
Conocer y experimentar nuevas culturas, hacer amigos de otros continentes, acercarse a otras realidades, desarrollar la autonomía y divertirse. Estas son algunas de las posibilidades que la experiencia internacional proporciona a cualquier edad.
Los programas de intercambio y viajes culturales son una buena alternativa para las familias que valoran la experiencia internacional como una oportunidad de crecimiento personal y desarrollo de la madurez.
En este colegio, durante las vacaciones de julio, los alumnos de 9º de Enseñanza Fundamental tienen la oportunidad de perfeccionar los conocimientos en Lengua Española y visitar algunas de las más importantes ciudades y regiones de España1.
El tradicional viaje, tan esperado por la mayoría de los alumnos del Colegio, tiene importancia primordial en su vida. La alumna Carla Kim Gaiesky, de 1ºB de Enseñanza Media ha viajado algunas veces al exterior con la familia, pero cree que la experiencia internacional organizada por el Colegio fue muy distinta: “Lo interesante de este viaje es que estamos con los compañeros y al mismo tiempo estudiando, vimos en los paseos lo que habíamos aprendido en clase y esa experiencia hace que lo guardemos para siempre en nuestra memoria”.
Amanda Marretto Silva, de 1ºD de Enseñanza Media, había realizado un intercambio a Londres un año antes de participar del viaje a España: “Las dos experiencias fueron positivas; en Londres, fui por medio de una agencia de intercambio, estuve alojada en un colegio y avancé mucho en el inglés. El viaje a España es memorable, porque estamos con los compañeros del cole, con los que tenemos más trato. En España no solo veíamos las fotos y leíamos los textos, sino que veíamos y escuchábamos lo que nos decían sobre los monumentos que teníamos justo delante o sobre la ciudad en que estábamos, es decir, no hay cómo no aprender.”
En otro contexto, los alumnos que participan de la CISV2 (Children’s International Summer Villages) creen que hacer amigos en otros continentes proporciona conocimiento para toda la vida “Hice amigos de países impensables” comenta Heloisa Bonchristiano Aigner Ribeiro, alumna de 7º B que pasó un mes en Filipinas.
En el CISV los jóvenes pasan por un período de preparación que incluye actividades de integración en tres encuentros y campamentos, pero no todos son elegidos para participar del viaje. Es necesario asistir a todas las actividades y demostrar rasgos colaborativos. Los padres pueden rechazar algunos destinos, pero no pueden determinarlo. Cuando Erik Lennart Chiconello Fager supo que iría a India se sorprendió y le despertó la curiosidad: “Todos los días, al llegar del cole, investigaba algo sobre India. Después de pasar un mes allí, descubrí que es un país en el que hay mucha pobreza, pero que también ofrece bellezas deslumbrantes como el Taj Mahal”.
Con el corazón en un puño, Cecília, madre de la alumna Catarina Marshall de la Matta Pires de 7º B EF que pasará el mes de julio en Austria, cree que dejarla hacer un viaje sola contribuye para su autonomía: “Tener contacto con niños de diferentes partes del mundo es una propuesta muy rica que permite reaccionar y reflexionar sobre la posibilidad de un mundo sin fronteras.”
Alessandra Bartholi, alumna de 3º de Enseñanza Media, tras pasar por un proceso selectivo que constaba de la presentación del currículo y de una entrevista por Skype, aceptó el reto de vivir durante cuatro meses en el Colegio St. Clare’s en Oxford3.
El colegio, referencia en IB en Inglaterra, oferta programas de corta duración Pre-IB a estudiantes de todo el mundo. Al tener la posibilidad de vivir en una residencia en la propia escuela con niñas polacas, italianas, africanas o rumanas, Alessandra cree que la experiencia no solo contribuyó para el perfeccionamiento del idioma sino también para conocer personas de varias partes del mundo.
“Mi primer objetivo era el inglés, pero al llegar allí el idioma pasó a formar parte de la rutina, con lo cual otras situaciones como tomar decisiones sola adquirieron mayores proporciones. Si por un lado conoces personas de todo el mundo, por otro, aprendes también a estar sola y disfrutar de tu soledad. Maduré mucho, creo que al volver era otra persona,” concluye Alessandra.
1Para saber más sobre el Viaje a España:
https://www.cmc.com.br/default.asp?PaginaId=6703
2CISV (Children’s International Summer Villages), comunidad global de voluntarios que se dedican a la creación de oportunidades para conocer las emociones y riquezas de la diversidad cultural por medio de programas educativos.
Para saber más sobre la CISV:
http://www.br.cisv.org/
3http://www.stclares.ac.uk/