El Espacio de Reflexión Escuela y Familia reanuda el ciclo de charlas con un tema relacionado con las cuestiones de género
La primera charla del 2º semestre, que se celebró el 5 de agosto, debatió el papel de los educadores y la familia en la transmisión de estereotipos
Por: Tatiana Maria de Paula Silva | 08 de agosto de 2014.
Dando inicio a la reflexión sobre las cuestiones de género, la profesora y científica social Célia de Lourdes Amaral de Almeida presentó a los participantes la diferencia entre sexo y género, por la que el primer concepto es un atributo biológico y el segundo, la construcción de una identidad que implica aspectos culturales y sociales.
Desde una perspectiva antropológica, histórica y social, la profesora propuso a los participantes el análisis de la construcción de los papeles que actualmente identificamos en las relaciones de género en nuestra sociedad y que son difundidos en los ambientes familiar, escolar y mediático.
“A lo largo de la historia de la humanidad, las cuestiones de género aparecen en el contexto social de formas muy distintas. Los hombres y las mujeres son concebidos y moldeados de maneras diferentes según el ambiente en que viven y esa constatación indica que los aspectos culturales son predominantes mientras que la naturaleza desempeña un papel muy débil en los comportamientos y conductas establecidos en la diferenciación de los géneros,” afirma Célia.
Según ella, los estereotipos femenino y masculino radicados en nuestra cultura son un factor de suma relevancia para la desigualdad social entre los sexos y del cual resulta violencia y discriminación contra la mujer. Según la investigación realizada en 2012 por la red internacional Social Watch, Brasil ocupa el 15º puesto en el ranking mundial de IEG (Índice de Equidad de Géneros).*
Para complementar la discusión, Kátia Regina Pupo, psicopedagoga y maestra en Psicología de la Educación, presentó una parte de su tesina de maestría, relacionada con la violencia moral. Según la investigación de la psicopedagoga, las niñas construyeron un modelo mucho más estereotipado sobre el comportamiento de los niños que sugiere que es de la naturaleza masculina una reacción agresiva y violenta en una situación de conflicto.
Durante la charla con los participantes, las expertas defendieron combatir los estereotipos en el universo educativo y familiar. Para ello, creen que es necesario reforzar en los niños, de manera igual, las capacidades intelectuales y afectivas inherentes a todos los seres humanos. Corresponde a la familia y a la escuela proporcionar las mismas condiciones de desarrollo emocional para ambos sexos y acentuar valores como el respeto y la igualdad.
