Charla con el escritor Santiago Beruete
Por: Tatiana Maria de Paula Silva
El 21 de mayo, el escritor, filósofo y profesor Santiago Beruete dio una charla a los profesores y demás empleados del Colegio bajo el tema de su obra “Aprendívoros: El cultivo de la curiosidad”. Para dar la bienvenida, el director gerente, Jorge Berné, presentó al conferenciante y sus obras y recordó a todos los significados que subyacen bajo el título de la 40ª Feria del Libro del Colegio, Cultivo Literario: Producción y consumo sostenible de la literatura. Para ello, relacionó la idea de “Cultivo” con el fomento de la literatura, la razón de nuestro evento literario.
Beruete empezó hablando de su trayectoria como profesor y escritor; destacó el poder transformador de la naturaleza en su vida a partir del momento en que empezó a dedicarse a cultivar un jardín. Explicó la idea del cultivo (sin comillas) como metáfora de la educación, pues cree que la labor de los profesores pasa por sembrar la curiosidad. “En las aulas se gesta el futuro de los países”, comentó.
Durante la charla, habló de los desafíos de la nueva educación que, según su punto de vista, debe preparar a los alumnos para lo que es humano: flexibilidad cognitiva, conciencia crítica, trabajo en grupo, entre otras habilidades que alcancen más el espectro de las relaciones que de los contenidos.
También destacó la importancia del uso de la naturaleza como herramienta pedagógica y alertó sobre los trastornos de salud por el empleo excesivo de tecnología al que los jóvenes están expuestos. Para él, los educadores deben utilizar el contacto con la naturaleza como una manera de manejar este uso, presentando alternativas a las pantallas en sus clases. Hay que destacar que la conferencia contó con la participación activa de los asistentes, que formularon buena cantidad de preguntas y reflexiones.
Finalmente, Beruete dejó a todos un mensaje inspirador y optimista: en todos los educadores permanece la fe en la semilla, todos somos jardineros sembrando las mentes. En la labor de cultivar, como de educar, radica la importancia de la paciencia y la confianza con respecto a algo que aún está en desarrollo.