Por: Gustavo Abou
La gastronomía española es considerada el corazón de la comida mediterránea. Hay un gran uso del aceite de oliva, vino y tomate, ingredientes que caracterizan ese tipo de culinaria. La variedad de regiones del país contribuye a una diversidad de verduras, cereales, hortalizas, carnes y pescados. Eso hace que los platos sean más ricos por sus ingredientes que por su preparación.
Algunos de los principales platos españoles son: la paella, un plato típico de la región sur del país, arroz, carne de pollo, conejo, caracoles, legumbres y verduras. El gazpacho, una sopa fría de tomates y vinagre, muy conocida en Andalucía. La tortilla de patatas, conocida en toda España, huevos y patatas. Y por último la escalivada, también muy conocida, un asado con tomate, pimiento, cebolla, berenjenas, aceite de oliva y sal.