El Espacio de Reflexión Escuela Familia promueve conferencia sobre Trastornos de Aprendizaje
Las expertas afirman que la asociación entre familia, profesores y profesionales es fundamental para escolarización adecuada del estudiante

Por: Tatiana Maria de Paula Silva | 09 de junio de 2014.

Las expertas Edith Rubinstein, psicopedagoga maestra en Psicología Educativa, y Silvia Ruschel, psicopedagoga y maestra en Logopedia Clínica, estuvieron el 3 de junio en el Espacio de Reflexión Escuela y Familia para conversar sobre el TDAH (Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad), más específicamente sobre la construcción de la atención y sobre Dislexia, especialmente sobre las cuestiones relacionadas con la construcción de la lectura y escritura.

Durante la conferencia las expertas explicaron que, antes de cualquier diagnóstico, los cuatro componentes del proceso de aprendizaje –cuerpo, organismo, deseo e inteligencia – deben ser analizados y estudiados a fondo por un equipo multidisciplinar.

La psicopedagoga Edith explicó que la construcción de la atención, aspecto que suele estar relacionado con el TDAH, es un proceso que empieza al nacer el niño y a partir de su relación con los padres o cuidadores y de la forma como se relaciona consigo mismo: “Cuando el niño comienza a aprender a estar solo, al detenerse sobre algo que le interesa – un juguete o un objeto –empieza a construirse la atención”, afirmó Edith.

Sobre la construcción de la lectura y de la escritura, la logopeda y psicopedagoga Silvia Ruschel explicó que el proceso de alfabetización empieza al adquirirse el lenguaje cuya construcción culmina en la escritura. En ese recorrido, el niño presenta diferentes fases en su desarrollo y cada niño tiene características y ritmos propios. “Para el niño, pensar y reflexionar sobre el lenguaje oral resulta trabajoso; durante el proceso de alfabetización suele soportar frustraciones y tal vez tarde un poco más en alfabetizarse, lo que no significa que sea disléxico,” comentó Silvia.

Para ambas expertas, el aprendizaje implica muchos factores y es normal que algunos desafíos se planteen durante el proceso. El trastorno representa el máximo grado de una dificultad persistente y que produce mucho sufrimiento al niño. Sin embargo, hay que distinguirlo de una situación transitoria que puede solucionarse con un seguimiento especializado sin uso de medicamentos.

Las profesionales afirman que la escuela y la familia deben trabajar juntas y estar atentas para apoyar a los niños que pasan por una dificultad de aprendizaje. Asimismo, es necesario que los padres reduzcan sus expectativas con relación al desempeño de sus hijos, que la escuela no lo encamine prematura o tardíamente a un especialista y que un equipo interdisciplinar investigue en profundidad las características del niño y dé el diagnóstico.

Para ellas, más importante que el diagnóstico es plantear herramientas y estrategias que puedan utilizarse para trabajar con el niño, auxiliarlo y fortalecerlo en el proceso de aprendizaje.


Fotos: Silvio Luiz Canella