Té de las abuelas 2017
Emoción y memoria se exaltan en el evento
Por: Tatiana Maria de Paula Silva | 2 de junio de 2017.
Los días 29 y 30 de mayo y 1 de junio, los alumnos de 2º año de Enseñanza Fundamental recibieron a las abuelas y a los abuelos con una actividad llena de ternura, cuyo objetivo fue el de promocionar el encuentro entre generaciones. El proyecto desarrolla las nociones de permanencia y de transformaciones ocurridas a lo largo del tiempo, objetivos trabajados principalmente en las clases de Geografía e Historia.
Según Denise Maria Milan Tonello, orientadora educacional de Enseñanza Fundamental I, durante el primer trimestre, los alumnos enviaron a las abuelas una carta de invitación al acto con un texto colectivo preguntando sobre los recuerdos de infancia, juguetes y costumbres de la época. La carta fue enviada por correo y, a la medida que las respuestas llegaban, los relatos eran leídos en clase. Los descubrimientos y recuerdos fueron compartidos por los grupos y alimentaron los debates que contemplan los objetivos del proyecto.
En el encuentro, los alumnos acogieron y acompañaron a sus abuelas hasta el aula, donde, en medio de un tendedero de cartas, los alumnos y profesoras explicaron el proyecto y vieron un vídeo de una colección de fotos y fragmentos significativos de las cartas.
Después, los nietos y sus abuelas participaron en un taller para la confección de un pequeño baúl de los recuerdos, preparado previamente por cada niño, con una foto y con un objeto significativo que escogieron para regalar a las abuelas. Como el baúl ya estaba pintado por los niños, las abuelas pegaron cintas e hicieron los retoques finales en compañía de sus nietos.
La inspiración para el taller ha venido del trabajo paralelo realizado para la Feria del Libro del Colegio Miguel de Cervantes, en el que los niños leyeron la obra Os guardados da vovó, de Nye Ribeiro. En la historia, el personaje tenía un baúl en que guardaba todos sus recuerdos especiales. Los niños, por medio de los relatos y de las fotos enviadas por familiares, reprodujeron escenas típicas de la época, como conmemoración de cumpleaños, juguetes o vivencias escolares. El trabajo finalizó con una exposición que decoró el estand de la Feria del Libro.
Acompañadas de sus nietos, las abuelas fueron invitadas a un té y, en medio del olor a pastel de zanahoria, pastel de berro y pan de queso, las charlas continuaron aflorando los recuerdos que ciertamente estarán guardadas no solo en el baúl de los recuerdos, sino también en el corazón de nietos, abuelos y de todos los que compartieron esos momentos.
Vea todas las fotos en el álbum al lado.